La vicepresidencia en El Salvador. ¿Qué suma al binomio electoral?

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El Salvador está viviendo la segunda generación democrática de postguerra. Por primera vez en 30 años se ha desmantelado la estructura bipartidista[1] que dominaba el espectro político.

La Constitución de 1983 pone a la cabeza del Órgano Ejecutivo al presidente y al vicepresidente. Sin embargo, el ciudadano no tiene la potestad de elegir directamente al vicepresidente, sino que se vota por una “planilla”. Lo anterior nos lleva a preguntar ¿Qué papel juega el vicepresidente en la estrategia electoral?

Tendencia presidencialista

Pampin[1], que estudia las candidaturas vicepresidenciales latinoamericanas a partir de 1980, presenta el caso de Salvador Sánchez Cerén, presidente saliente del país, como un caso de “vicepresidente candidato exitoso”.  Y aunque no se puede negar el éxito de la candidatura, este no se debió precisamente al candidato. Lo que triunfó en este caso fue la estrategia del partido, exponer por un periodo a su futuro candidato, de la mano de una figura tan imponente e independiente como lo fue el presidente Mauricio Funes (FMLN 2009-2014).

Pero el carácter eminentemente político del vicepresidente se ve solo en los gobiernos de izquierda. Antes de 2009, en los tres gobiernos de ARENA (1994, 1999, 2004) la estrategia del partido fue incorporar figuras provenientes del sector privado, vinculando el ala empresarial a las políticas públicas. La figura más representativa del sector privado empresarial ha sido Ana Vilma de Escobar (ARENA 2004-2009), quien al igual que Carlos Quintanilla Schmidt, su antecesor como vicepresidente (ARENA 1999-2004), mostró su interés en correr por la presidencia en el periodo posterior a su gestión, sin embargo, ninguno de los dos logró los apoyos suficientes.

Con el triunfo del FMLN, en 2009, la tendencia del vicepresidente de buscar la candidatura de la primera magistratura se mantuvo. Sánchez Cerén (VP 2009-2014) fue proclamado por consenso de las bases y la cúpula, como el candidato a la presidencia, y fue electo presidente del país en 2014. Oscar Ortiz (VP 2014-2019) buscó la candidatura de su partido, sin embargo, tras una derrota del FMLN en las elecciones legislativas de 2018, desistió de participar y apoyó la candidatura de Hugo Martínez (Canciller 2009-2019)

Estrategia de selección

Podemos identificar dos tendencias generales de selección, y particularmente cada una se circunscribe a una ideología partidaria. ARENA, ha mantenido una tendencia de buscar un compañero de fórmula presidencial, de sectores privados más alejados de la política. Así, Borgo Bustamanete (VP 1994-1999), Quintanilla Schimdt (VP 1999-2004), De Escobar (VP 2004-2009), Portillo Cuadra (Cand. VP 2014), Lazo (Cand. VP 2019) han formado parte de esta estrategia.

Por su parte el FMLN ha seguido la estrategia de incorporar al binomio presidencial a reconocidos actores políticos de sus filas. Lima Rivera (Cand. VP 1994), Nidia Díaz (Cand. VP 1999), Mata Benett (Cand. VP 2004), Sánchez Cerén (VP 2009-2014), Ortiz (VP 2014-2019), Sosa (Cand. VP 2019).

¿Y con el nuevo gobierno?

Si en los gobiernos de ARENA y el FMLN la decisión se tomó en el interior del partido, con Nayib Bukele no sucedió lo mismo. Primero, porque Bukele utilizó a GANA como instrumento partidario para acceder a la presidencia y no existe una vinculación ideológica entre ambos. Segundo, porque su partido Nuevas Ideas es de reciente creación y no posee cuadros con experiencia política.

Cuando Bukele se inscribió para competir en las internas de GANA, reveló que tenía dos opciones para su compañero de fórmula: la primera, Juan José Martell, dirigente de Cambio Democrático y diputado por ese partido en el Congreso (el único diputado del partido), y segundo, Félix Ulloa, abogado y ex presidente del TSE, ambos provenientes de la política.

Con esto Bukele buscó reforzar su candidatura, complementándose con un perfil experimentado proveniente del sector político del país. Finalmente Ulloa se alzó como vicepresidenciable, incorporando el elemento académico -técnico al binomio que en junio de 2019 tomará las riendas del país.


[1] Pampin, Ernesto. Las candidaturas presidenciales de vicepresidentes y otros sucesores en perspectiva. Ponencia preparada para el 9no Congreso de Ciencia Política, 26-28 de Julio, Montevideo, Uruguay.



[1] Álvaro Artiga estudia el número de partidos efectivos en Centroamérica. Ver: Artiga González. El proceso de estructuración de los actuales sistemas de partidos políticos en Centroamérica. En La democracia de Costa Rica ante el siglo XXI / Jorge Rovira, editor. — San José, C.R. EUCR, 2001.

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